miércoles, 22 de julio de 2009

"Mientras la sociedad no construya el tema del maltrato a las personas mayores como un problema, no existirá"

El Observatorio del Mayor de Navarra impartió el mes pasado una charla sobre los malos tratos hacia los ancianos, una realidad que preocupa a los implicados. José Luis Larrión, experto en el tema, cree necesaria la sensibilización de la sociedad para contrarrestarlos Los malos tratos no sólo afectan a los niños o a las mujeres, también se dan hacia las personas mayores. A pesar de la falta de estadísticas que cuantifican los casos en el Estado o en la Comunidad Foral, la temática preocupa por igual a implicados y profesionales como José Luis Larrión, jefe del Servicio de Geriatría del Hospital de Navarra.

¿Cuáles son los signos que revelan la existencia de malos tratos hacia una persona mayor?

Los síntomas son muy variables y, a veces, son muy inespecíficos porque a parte de los malos tratos en el plano físico -como hematomas- pueden presentarse como recelo hacia el cuidador, sobre todo en el caso de los dementes que se asustan cuando los ven. Sí que hay datos clínicos que permiten diferenciar los hematomas producidos por una caída y los producidos por malos tratos. No obstante, siempre queda la sospecha clínica ya que estas personas reingresan repetidas veces. En el abuso financiero es más difícil porque hay que escuchar, sospechar. Otra cosa es que la persona sea proclive a confesarlo o no. Y en el terreno sexual es mucho más complicado porque es un tabú que pertenece a la intimidad y no nos atrevemos a preguntar. Pero sí es cierto que existen tablas estandarizadas para detectar e interrogar las personas mayores.

¿Cuál es la situación actual en Navarra?

La verdad es que carecemos de cifras al nivel nacional o de Navarra. No obstante, lo que la realidad dice es que se produce en todos los ámbitos. Sí que es cierto que ahora se han podido hacer algunos meta-análisis, al juntar varios estudios como los canadienses -pioneros en el tema- con otros más pequeños para tratar de sacar conclusiones conjuntas. Las cifras que se mueven son entre el 2% y el 10% de las personas mayores. Son una variabilidad demasiado importante pero existe. La literatura nos dice que nadie está libre de ser víctima de malos tratos y, en diferentes sociedades, se ha demostrado que existe. Por tanto no hay que pensar que aquí no existe.

Se puede decir que siempre han existido pero es sólo ahora que nos damos cuenta de ello.

La inclusión de los malos tratos en los textos científicos es muy reciente. Fue en 1975, cuando se llevan muchos años hablando del maltrato infantil. También es cierto que no han tenido tanta repercusión en los medios como la violencia de género. No se puede olvidar que detrás de cada historia de malos tratos existe toda una historia previa de convivencia familiar. También es cierto que es más sutil, más difícil de detectar, de analizar y sobre todo de manejar. En el caso de los niños víctimas de malos tratos, como es una persona incompetente legalmente, es mucho más fácil tomar decisiones por él. En el caso de las personas mayores, son capaces legalmente y, a veces, aceptan esta situación.

¿Qué tipos de malos tratos existen?

El menos frecuente es el sexual, siempre con la duda de que sea verdaderamente así o porque es más difícil de detectar o de confesar. El más frecuente es el psicológico. Si pegas a una persona no sólo le haces daño físico sino que también infliges daño psicológico. En cuanto a la negligencia, es un terreno complicado porque es verdad que hay personas que no reciben los cuidados necesarios que precisan. No siempre es por intención de hacer daño y no siempre esa no calidad de cuidados implica un riesgo para la víctima. Por lo cual, sin estas dos premisas es muy difícil conceptualizar este comportamiento como malos tratos. Entonces, no se puede dar cifras o decir cual es el menos frecuente porque hay muchas personas con buena voluntad para cuidar pero que no lo hacen bien por desconocimiento. Muchas veces es culpa de terceros, es decir de los profesionales sanitarios que no son capaces de explicar cuáles son las pautas y de orientar bien. Se habla de que el 4% de las personas mayores sufren abusos en el plano financiero. Pero todo esto depende de cómo definas el tipo de malos tratos. Son arenas movedizas pero son situaciones reales. Otra cosa es que una persona demente use su cuenta corriente cuando no está capacitada legalmente. No obstante, existen muchos grises ahí.

¿Existe un perfil de las víctimas de esos malos tratos?

Cualquier persona mayor, de cualquier condición psico-física como de cualquier condición sociocultural puede ser víctima. Ahora, hay grupos de riesgo más vulnerables como es el caso de los dementes. No hay demasiado consenso por saber si las personas dementes o con discapacidad son más vulnerables. Posiblemente, determinadas cuestiones como la negligencia, sí. Luego, hay que matizar entre los diferentes tipos de malos tratos. Las personas aisladas socialmente son más vulnerables porque es más fácil abusar de ellas puesto que dan la sensación de que nadie se va a enterar. Las personas que viven solas son más fácilmente víctimas de malos tratos en el plano financiero.

¿Y del maltratador?

Uno de los principales factores de riesgo es el abuso del alcohol o de las drogas. También el hecho de tener una enfermedad psiquiátrica, sobre todo una depresión. Las personas que han vivido con un maltratador tienen riesgos de serlo ellas mismas. También se ha hablado de la violencia familiar, es decir padres maltratadores, hijos maltratadores. Esto parece que es cierto en algunos casos pero no hay consenso de que esto sea un factor real de riesgo. Sí que se apunta a que es posible que el hijo maltratado por su padre, se convierta en maltratador, tanto de su padre como de sus hijos. En el caso de los niños es más claro, en la violencia hacia los mayores no lo es.

¿Ha vivido algún caso de malos tratos?

Sí que he sospechado alguna vez. Ha habido una persona, reingresadora habitual por deshidratación, con tres o cuatro días de diferencia. Tras hablar con trabajadores sociales, vecinos, etc, llegamos a la conclusión de que su esposa lo dejaba encerrado en casa mientras estaba fuera todo el día. Los vecinos se enteraron de esta situación por los gritos del hombre porque tenía una demencia.

¿Qué cree que se debe hacer para evitar posibles casos de malos tratos hacia los ancianos?

Más que estadísticas creo que hace falta una sensibilización social hacia esta cuestión. Mientras la sociedad no construya el tema de malos tratos como un problema, no existirá. Y si no existe, no hay que darle soluciones. El día en que la gente se mentalice de su existencia, creo que se pondrán en marcha mecanismos de detección, de prevención, de soporte y de ayuda a las víctimas, al igual que con la violencia de género o el maltrato infantil. El hecho de que las personas mayores estén ya sensibilizadas sobre ese tema es importante. Al igual que el interés de los medios de comunicación. Esto permite una especie de conmoción social para que la gente se dé cuenta de que también existe el maltrato a las personas mayores. La prevención primaria es que no exista.

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