La eutanasia fue uno de los asuntos que cosecharon argumentos en favor y en contra con igual vehemencia por parte de los candidatos a ocupar una banca en el Congreso.
Así, los postulantes de centro Mauricio Macri y Ricardo López Murphy manifestaron su posición contraria a la posibilidad de la eutanasia. "Creo en la defensa de la vida hasta el último momento; siempre hay esperanza por más adversas que sean las circunstancias", enfatizó López Murphy. "Sólo Dios da y quita la vida", reforzó Macri.
También el oficialista José Pampuro desaprobó la eutanasia. "Mi formación religiosa, filosófica y profesional -soy médico- me impulsa ante todo a preservar la vida", afirmó.
Como era previsible, la contraparte vino desde la izquierda. Ariel Basteiro definió la muerte digna como "un derecho humano fundamental que todo estado laico, plural y democrático debe garantizar". Y Luis Zamora opinó que "son decisiones individuales en las que el Estado no debe inmiscuirse".
Otros se mostraron más permeables a esa posibilidad y dejaron la decisión en manos del enfermo y de su familia. Es el caso de los radicales Facundo Suárez Lastra y de Luis Brandoni.
Elisa Carrió se mostró en contra de una ley de eutanasia porque "puede terminar siendo la muerte rápida de pacientes pobres con problemas oncológicos, porque los tratamientos son muy onerosos", aunque defendió la libertad individual del enfermo y su familia cuando hay muerte cerebral.
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