
¿CÓMO SE COLOCA Y USA UN PRESERVATIVO?
La eficacia del preservativo depende de su correcta colocación y uso. En todas las cajas de condones hay instrucciones con dibujos muy claros. Lo mejor es leerlas y ensayar su colocación antes de mantener la relación sexual. El pene debe estar muy erecto para que el preservativo pueda ser colocado.
Lo ideal es que el momento de la penetración forme parte del juego sexual para que no se produzca una bajada de la erección. Una vez abierto cuidadosamente el envase para no estropear el condón, éste debe cogerse por la punta, colocarse encima del glande e ir desenrollándose poco a poco hasta la base del pene. Mientras se desenrolla con una mano, con la otra hay que mantener cogida la punta del preservativo para que quede suelto por arriba.
Durante el coito, es importante comprobar que el condón sigue en su sitio. Finalizado el coito, hay que tener cuidado al sacar el pene de la vagina para evitar que el preservativo se quede dentro, ya que al eyacular el pene pierde erección y el preservativo se le queda grande. Para ello se agarra el condón antes de sacarlo. Lo mejor es retirarlo nada más eyacular, antes de que se pierda la erección.
¿QUÉ HAY QUE HACER SI SE ROMPE UN CONDÓN?En estos casos la mejor solución es acudir lo antes posible, dentro de las 48 horas siguientes al coito de riesgo, a un centro de salud (urgencias hospitalarias o centro de planificación familiar) para que un ginecólogo pueda recetar a la mujer la ‘píldora del día después’ y evitar así un posible embarazo no deseado.
Cuanto antes se tome la píldora postcoital mejor, ya que con el paso de las horas va perdiendo efectividad. Tomadas estas medidas de emergencia lo recomendable es acudir al ginecólogo para que descarte cualquier posibilidad de embarazo. Por otra parte, para evitar roturas, hay que asegurarse de que los preservativos que se usan están homologados, no están caducados y se colocan y utilizan adecuadamente según las instrucciones del fabricante.